
Un cazabombardero supersónico ruso se estrelló contra un edificio en una zona residencial de Yeisk, ciudad del suroeste de Rusia, a orillas del mar de Azov.
Seis personas murieron, aunque las autoridades locales no descartaron que haya más fallecidos. Además, 21 personas resultaron heridas.
“Se sabe con seguridad de tres fallecidos”, señaló Anna Minkova, vicegobernadora del territorio de Krasnodar, al que pertenece Yeisk.
El cazabombardero, un moderno Su-34, “se estrelló contra un edificio residencial”, informó el Ministerio de Defensa de Rusia, cuando el avión ascendía para efectuar un vuelo de entrenamiento desde el aeródromo del Distrito Militar Sur.
La causa del accidente fue el incendio de uno de los motores durante el despegue, según el piloto, que se eyectó.
La nave, cuyo costo es de unos 35 millones de euros, cayó y se incendió, generando llamas que se extendieron por un área de 2.000 metros cuadrados. Entre 15 y 17 departamentos fueron dañados por el fuego.
En tanto, Rusia enviará unos 170 tanques, 200 blindados y 100 piezas de artillería a la frontera sur de Bielorrusia, informó el Ministerio de Defensa bielorruso. Al equipo militar que enviará el Kremlin se sumarán alrededor de 9 mil militares para realizar “ejercicios puramente defensivos”, según se indicó desde Minsk.