El fuego arrasó un hotel de 12 plantas en la estación de esquí de Kartalkaya, en la provincia turca de Bolu, al noroeste del país, causando la muerte de al menos 76 personas.
Según las autoridades, al menos dos de ellas murieron tras saltar del edificio para escapar de las llamas.
Además, más de 50 personas resultaron heridas en el incendio del hotel Grand Kartal, según el ministro turco del Interior, Ali Yerlikaya.
El incendio se declaró en una época del año en la que los hoteles están abarrotados, ya que las escuelas de todo el país se toman dos semanas de vacaciones de invierno.
“Tenemos el corazón destrozado. Estamos de luto”, declaró Yerlikaya a los periodistas a las puertas del hotel.
“Deben saber que quienquiera que sea responsable de causar este dolor no escapará a la Justicia”, añadió.
Nueve personas han sido detenidas en el marco de una investigación sobre el incendio.
El ministro turco de Justicia, Yilmaz Tunc, dijo que el propietario del hotel estaba entre los detenidos para ser interrogado en la investigación.
El Gobierno designó a seis fiscales para dirigir la investigación del incendio, que se cree que comenzó en el restaurante del hotel y se propagó rápidamente por todo el edificio.
El hotel tenía 248 huéspedes registrados en el momento del incendio, que se declaró a las 3:27 hora local (1:27 CET). Los Bomberos empezaron a responder a la crisis a las 4:15 hora local. Según Yerlikaya, se ha identificado a 45 de las 76 personas confirmadas como fallecidas, mientras prosiguen los esfuerzos para identificar a las víctimas restantes. Los cuerpos de los identificados fueron entregados a sus familias.
Según el ministro turco de Sanidad, Kemal Memisoglu, al menos uno de los heridos se encontraba en estado crítico, mientras que otros 17 fueron rápidamente atendidos y dados de alta del hospital, al haber sufrido sólo heridas leves.
Un infierno
El suceso causó conmoción en todo el país tras conocerse los detalles de lo que sufrieron las víctimas. Atakan Yelkovan, un huésped que se alojaba en la tercera planta del hotel, declaró a los medios de comunicación turcos que se había producido un caos en los pisos superiores, mientras otros huéspedes se peleaban intentando escapar.
Las imágenes del incendio que circulan por las redes sociales y los canales de televisión turcos muestran el tejado y las plantas superiores del hotel en llamas. Los testigos y los primeros informes sugieren que el sistema de detección de incendios del hotel no funcionó. Los informes también dicen que el revestimiento de madera del exterior del hotel puede haber acelerado la propagación del fuego.
“Mi mujer olió a quemado. La alarma no sonó”, dice Yelkovan. “Intentamos subir, pero no pudimos, había llamas. Bajamos y salimos”. El ministro turco de Turismo, Mehmet Nuri Ersoy, declaró a la prensa que el hotel se sometió a inspecciones de seguridad contra incendios y de competencia en 2021 y 2024. Según Ersoy, los bomberos no informaron negativamente en ambas inspecciones.
El presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, anunció un día de luto nacional para el miércoles. Añadió que todas las banderas de los edificios gubernamentales y de las misiones diplomáticas turcas en el extranjero se bajarían a media asta en honor a las víctimas.
En un discurso pronunciado el martes, el dirigente turco declaró: “Desgraciadamente, esta mañana hemos recibido noticias muy tristes de Bolu, Kartalkaya. Nuestros hermanos y hermanas murieron y resultaron heridos en un incendio que se declaró en un hotel”. Erdogan subrayó que se tomarán todas las medidas necesarias para identificar lo sucedido y cómo se causó exactamente el incendio, señalando que cualquiera que sea encontrado responsable del trágico incidente, tendrá que rendir cuentas.