La fuente de las Nereidas es una alegoría del mito griego del nacimiento de la diosa Afrodita que mide 11 metros de altura. Construida en Roma, demoró aproximadamente dos años debido a su gran tamaño y complejidad, en los que trabajaron tanto los asistentes como Lola Mora que se encargó de ultimar los detalles.
En 1902 fue trasladada a nuestro país, primero en el centro de la Plaza de Mayo y posteriormente detrás de la Casa Rosada. Ante la queja de los sectores más conservadores por los desnudos de la fuente, se movió por última vez al lugar donde se encuentra hasta el día de hoy, la Costanera Sur de la Ciudad de Buenos Aires.