Hace poco más de dos meses, Daniel Melingo publicó en sus redes un video acompañado de una descripción que rezaba: “Una canción que llevaba tiempo esperando la voz de Cristian para encontrar una dimensión”. El tema era “Pesar”, uno de los que integran su canónico disco “Tangos bajos” (2018), y el Cristian al que se refería no era otro que el “Pity” Álvarez.

En las imágenes, que también son eslabones de un documental, Pity cruza la puerta, saluda a los músicos con una visible alegría, toma asiento y recibe los vinilos de Melingo con un entrañable brillo en sus ojos. Mira a su alrededor, respira, huele el aroma de un entorno que le sienta bien, está cómodo. Atento, lúcido y entusiasta, escucha las últimas instrucciones de Daniel, que busca en la voz de Cristian el tono dramático del sur porteño. “Que placer estar cantando con ustedes muchachos”, agradece el emblema rollinga. Es recíproco.

El Pity Álvarez volvió y grabó cuatro canciones - FM Rock & Pop 95.9

Álvarez marca con su pierna el 2×4 que ya suena y cimienta la atmósfera que da marco a su voz rústica, sentimental, comprometida. Se produce así la colisión de dos mundos, en apariencia lejanos, pero unidos por el barro y la añoranza de los viejos tiempos, el arrabal y los amores truncos. La guitarra de Muhammad Habbibi, el contrabajo de Pato Cotella y el fuelle de Camilo Ferrero configuran la nave ideal en la que viajan las conmovedoras palabras que el cantor hace suyas, insolente y mundano.

“En la noche, andando entre paredes, temblando en la tristeza y dándole al dolor. Desde que me dejaste, cerca de aquel callejón, comencé gastándome la vida, en los peores vicios que pude procurar”, canta el Pity, atravesado por la poesía de su amigo, que parece haber escrito parte de su camino, curtido entre adoquines y fantasmas.

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¿Quién es “Pity” Álvarez?

Fundó Viejas Locas e Intoxicados, plasmó como nadie los avatares de la juventud de una época y acarreó la entrañable poesía de los barrios a la cima de los rankings del rock vernáculo.

Cristian Gabriel Álvarez Congui, más conocido como “Pity” de Viejas Locas, nació el 28 de junio de 1972 en la Ciudad de Buenos Aires y vivió sus primeros años en el barrio porteño de Congreso. Más tarde se mudaría al barrio Piedrabuena, en Villa Lugano, donde moldearía su alma rebelde y sensible, que lo llevó a convertirse en el rockero y cronista suburbano que supo reflejar el bagaje descangallado de gran parte de una generación.

En 4° año de la secundaria lo expulsaron del colegio Industrial Don Orione, pero poco le importó, ya que había puesto el foco en la música y daba los primeros pasos con su banda.

Viejas Locas debutó en vivo el 3 de noviembre de 1989

Aquella formación brindó pocos shows ese año y, luego de que todos los integrantes decidieron abrirse del proyecto, Pity reclutó a tres nuevos músicos para formar la nueva Viejas Locas: Sergio “Pollo” Toloza (guitarrista), Fabián “Fachi” Crea (bajista) y Abel Meyer (baterista). Más tarde la banda sería completada por Ezequiel “Peri” Rodríguez (en armónica) y Juan “Juancho” Carbone (en saxo). Luego se sumó algunos años al grupo Adrián “Burbuja” Pérez (en teclados).

Su primer disco oficial llega en el año 1995 bajo el nombre de “Viejas Locas”, con doce canciones, nueve de autoría de Pity. El segundo disco sale a la luz en el año 1997 bajo el nombre de “Hermanos de sangre”, conteniendo trece canciones, diez de su autoría. “Especial” fue el último disco de la década del ’90, ya que para el año 2000, en pleno apogeo de Viejas Locas, se separan debido al cansancio y desgaste entre los miembros del grupo.

Viejas Locas: gran noche en la trastienda y un regalo musical para sus fans

Intoxicados, la nueva banda

Hacia fines del año 2000, tras la separación de Viejas Locas, Pity forma una nueva banda junto a Abel Meyer en batería, Adrián “Burbujas” Pérez en teclados y Ezequiel “Peri” Rodríguez en armónica, todos excompañeros y amigos de la banda de Piedrabuena. A este proyecto se sumaron Jorge Rossi en bajo, que hacía poco tiempo había dejado Los Gardelitos, y Felipe Barrozo, en guitarra. Tiempo después se sumarían Fabio Cuevas en percusión y Víctor Djamkotchian, en saxo, sellando así la formación de “Intoxicados”.

En noviembre de 2001 salió a la venta su primer disco: “¡¡Buen Día!!”, grabado entre julio y septiembre de ese año. En el 2003 sacaron su segundo disco de estudio, “No es solo Rock and roll”, con cortes de difusión como “Está saliendo el sol” y “Una vela”. En el 2005 se grabó “Otro día en el planeta Tierra”, el tercer álbum de la banda, acompañado con su primer DVD grabado gran parte en Tilcara, Jujuy. “Fuego” y “Señor kioskero” fueron los elegidos para iniciar la difusión de este disco, que se vio presentado el 22 de septiembre en La Trastienda con un set acústico.

Nuevo corte de Intoxicados - FM Rock & Pop 95.9

En el 2008 la banda lanzó su cuarto y último álbum de estudio, titulado “El exilio de las especies (Thend)”. Fue la tercera parte de la trilogía que comenzaba con “No es sólo rock and roll”, y los cortes de difusión fueron las canciones “Pila Pila” y “Noche con amigos”.

El 14 de noviembre de 2009 Cristian “Pity” Álvarez regresó con su antigua banda “Viejas Locas” en el estadio del Club Atlético Vélez Sarsfield, pero el regreso se vio opacado por los incidentes en las afueras del estadio causados por la represión policial, que derivó en la muerte del joven Rubén Carballo. Tras idas y vueltas y un proceso judicial, el 24 de noviembre de 2011 lanzan el cuarto trabajo discográfico de estudio de Viejas Locas: “Contra la pared”, un disco que contiene trece temas, de los cuales once son autoría de Álvarez.

El músico afrontó varios altercados con la ley y en julio de 2018 fue arrestado por el homicidio de Cristian Díaz, por el que fue procesado días más tarde por el delito de “homicidio calificado por el uso de arma de fuego”. En paralelo, Pity cursó una internación para paliar sus adicciones y otros problemas de salud. En marzo de 2023 quedó en libertad y, lentamente, retoma la senda de la música que supo hacerlo feliz ¿Ocurrirá?