Educación

El Gobierno porteño anunció una reforma de la secundaria: ¿en qué consiste?

El cambio empezará en marzo de 2025 en 30 escuelas que definieron su participación voluntariamente. El objetivo es extenderlo luego al resto del sistema.

El Gobierno porteño anunció una reforma de la secundaria: ¿en qué consiste?

A partir de marzo de 2025, el Gobierno porteño implementará una reforma de la secundaria que empezará por 30 escuelas “pioneras” que se ofrecieron voluntariamente (19 públicas y 11 privadas) y que contarán con acompañamiento presencial de los equipos del Ministerio de Educación.

La medida se hará efectiva por medio de una resolución que “habilita” a las escuelas a definir los cambios necesarios en la organización de los contenidos, la dinámica institucional y el trabajo docente, entre otras cuestiones.

A partir de 2026, la reforma se extenderá en forma gradual en las escuelas estales y privadas, con el objetivo de llegar eventualmente a los 195.900 estudiantes que cursan la secundaria en alguna de las 508 escuelas de ese nivel en la ciudad.

Desde el Gobierno porteño aclararon que la secundaria se seguirá organizando por años (como ahora), que no habrá cambios en la duración y que los grupos de alumnos siempre pasarán de año juntos.

Sin embargo, se pasará un sistema por niveles de avance en cada materia: en una clase, podrán convivir alumnos y alumnas que estén aprendiendo matemáticas de tercer año con otros que deban matemática de segundo.

Desde el Gobierno de la Ciudad indican que las materias serán las mismas, pero no habrá más “previas”.

De todos modos, aclararon que si no se aprueba un nivel o contenido, no se podrá avanzar en ese nivel hasta aprobarlo.

La idea de “integración de los aprendizajes” apunta a que existan más espacios interdisciplinarios, por ejemplo por medio de proyectos o resolución de problemas que requieran vincular distintas materias.

Junto con los contenidos “nodales”, también habrá “contenidos de profundización” divididos en bimestres o cuatrimestres.

Para pasar de nivel, los alumnos deberán acreditar el 100% de los contenidos nodales.

Además, indicaron que la “autonomía estudiantil” apunta a que los alumnos tomen algunas decisiones sobre su recorrido en la escuela, por ejemplo eligiendo materias optativas o talleres en función de sus intereses personales, donde por ejemplo podrían mezclarse estudiantes de distintas edades.

Uno de los objetivos fundamentales es fortalecer la motivación y reducir el ausentismo: hoy un 32% de los alumnos falta más del 20% de los días de clase.

Enfatizaron que la escuela seguirá siendo presencial y que la reforma no prevé sustituir horas presenciales por clases virtuales.

La propuesta implica una revisión del rol docente, con la meta de que en todas las escuelas secundarias haya profesores “por cargo” (y no por hora cátedra).