Graciela Sosa, madre de Fernando Báez Sosa, el joven de 18 años que fue asesinado a golpes hace cuatro años a la salida de un boliche de Villa Gesell, aseguró que “el tiempo se detuvo” para ella y su esposo cuando mataron a su hijo, a quien extraña “terriblemente“.
Al mismo tiempo manifestó que “confía” en que el Tribunal de Casación Penal bonaerense hará justicia al resolver las apelaciones de las condenas a prisión perpetua de cinco de los involucrados en el hecho y de otros tres que recibieron 15 años de cárcel.
“Seguimos igual, hasta peor. Nunca pensé que con el correr del tiempo iría empeorando. Me siento bajoneada, pasaron las fiestas de Navidad y Año Nuevo, que fueron muy difíciles para nosotros”, dijo la mamá de Fernando en diálogo con la agencia de noticias Télam, al cumplirse el cuarto aniversario del asesinato de su único hijo.
En la noche de este jueves hubo una concentración y una misa interreligiosa en las escalinatas de la Facultad de Derecho de la Universidad de Buenos Aires, sobre la avenida Figueroa Alcorta 2263, en el barrio porteño de Recoleta, en homenaje a Fernando.
Los padres esperan que sea favorable el fallo de la Sala 2 del Tribunal de Casación Penal bonaerense, a cargo de los jueces Mario Kohan, Fernando Mancini Hebeca y María Florencia Budiño, al momento de resolver las apelaciones presentadas por sus abogados, Fernando Burlando, Fabián y Facundo Améndola, y la fiscalía, que reclaman que los ocho involucrados en el crimen reciban la pena de prisión perpetua como coautores del “homicidio doblemente agravado por el concurso premeditado por dos o más personas y por alevosía en concurso ideal de lesiones leves”.
Asimismo, el tribunal bonaerense debe analizar una serie de nulidades y planteos, además del pedido de revisión de las penas impuestas por el Tribunal Oral en lo Criminal 1 de Dolores, presentados por el defensor Hugo Tomei, quien desde el inicio de la investigación cuestionó la legalidad del proceso.
“Cuando se hace larga la espera se generan muchas cosas, pero confío en que se hará justicia por Fernando. Habiendo tantas pruebas, confío en que se hará justicia”, expresó Graciela.
Además, aseveró: “Extraño terriblemente a mi hijo. Ya son cuatro años y para nosotros el tiempo se detuvo, no somos los mismos que éramos antes. Vamos a llevar un duelo para siempre, por lo que tratamos de convivir con tanto dolor. No encontramos una razón o un motivo para vivir en paz“.
Por su parte, Silvino Báez, padre de Fernando, advirtió que hay “rumores” que anticipan una rebaja en las sentencias de los jóvenes condenados a perpetua, aunque aseguró no tener miedo ante el fallo de Casación.
“Le llegaron rumores al doctor Burlando que a alguno le quieren bajar la condena porque son muy jóvenes para tantos años de cárcel. Pero una vez que uno cumple 18 años, uno tiene que hacerse cargo de sus actos. Deben hacerse responsables del asesinato de mi hijo”, manifestó Silvino.
Luego, el hombre afirmó que su situación emocional es “complicada” y se mostró indignado con el trato hacia los rugbiers en la Alcaidía 3 de Melchor Romero.
Por el crimen de Báez Sosa fueron sentenciados de manera unánime a prisión perpetua Máximo Thomsen (24), Ciro Pertossi (23), Enzo Comelli (23), Matías Benicelli (24) y Luciano Pertossi (22).
Los jueces María Claudia Castro, Emiliano Lazzari y Christian Rabaia del TOC 1 de Dolores condenaron además a Blas Cinalli (22), Ayrton Viollaz (24) y Lucas Pertossi (24) a 15 años de cárcel al considerarlos “partícipes secundarios” del homicidio doblemente agravado.
El crimen de Fernando ocurrió durante la madrugada del 18 de enero de 2020 a la salida del boliche “Le Brique”, en pleno centro de Villa Gesell.