Los fiscales a cargo de la causa iniciaron una investigación para investigar a uno de los peritos de la defensa de la psiquiatra Agustina Cosachov, una de las principales imputadas en el caso, como uno de los presuntos responsables de la filtración de los resultados del informe que hubo el viernes pasado a la prensa.
Las 70 páginas del dictamen fueron presentadas este mediodía por el coordinador de la junta, el médico legista Federico Corasaniti, en la sede de la Fiscalía General de San Isidro, donde fueron convocadas las partes.
Fuentes judiciales precisaron a Télam que el dictamen obtuvo la conformidad de 17 de los 22 que peritos que participaron de la junta, y que únicamente no lo firmaron los cinco de las defensas del neurocirujano Leopoldo Luque, de la psiquiatra Cosachov y del psicólogo Carlos Ángel “Charly” Díaz, quienes ya presentaron -o lo harán en los próximos días- informes en disidencia por separado.
A la salida de la audiencia, el abogado Mario Baudry, quien representa como particular damnificado al hijo menor que Maradona tuvo con su pareja Verónica Ojeda, confirmó que el informe presentado es el mismo que trascendió el viernes y adelantó que pedirá el cambio de calificación, que hasta ahora era “homicidio culposo”.
“Vamos a pedir en las próximas horas el cambio de carátula a abandono de persona agravada y homicidio con dolo eventual”, anunció el letrado, quien explicó ante la prensa que el primer delito implica una pena de 5 a 15 años de cárcel, y el segundo, de 8 a 25.
Más temprano, había mencionado también la posibilidad de sumar los delitos de “facilitación de drogas para su consumo y adulteración de documento público y de las firmas de Diego”.
“De la causa surge claro y concreto toda la manipulación que hace todo el entorno respecto de la familia y en el informe de la junta médica queda muy claro que los médicos en ningún momento le contaron a la familia toda la gravedad que tenía el cuadro de enfermedad de Diego”, comentó Baudry.
“La situación después de este informe es grave de cómo manejaron la salud de Diego y termina siendo triste porque lamentablemente lo que uno venía diciendo de la causa está confirmado en los 24 puntos de pericia”, agregó el abogado.
Rodolfo Baqué, quien defiende a la enfermera Gisela Dahiana Madrid, también imputada en la causa, responsabilizó de la muerte de Maradona al “equipo médico” y afirmó que no tiene dudas de que “esto es un homicidio con dolo eventual”, aunque fue por más cuando dijo que el expediente “camina por la delgada línea gruesa del dolo directo”.
Otro que habló a la salida de la fiscalía fue Julio Rivas, el defensor de Luque, quien aseguró que el dictamen de la junta fue “parcializado, malo y sin fundamentos científicos” y adelantó que presentará una “impugnación judicial”.
“Hemos presentado un informe de cien páginas donde destruimos por completo el informe”, señaló, al hacer referencia a las conclusiones de sus peritos de parte que afirmaron que el fallecimiento de Maradona había sido consecuencia de una “muerte súbita”.
Vadim Mischanchuk, defensor de Cosachov, también afirmó que la muerte de Maradona se debió a “una patología preexistente que no guarda ningún tipo de relación con la actividad psiquiátrica” desarrollada por su clienta, ni a la medicación que le prescribió.
En la audiencia de hoy, la defensa de Cosachov quedó expuesta cuando se supo que la copia del informe que se filtró el viernes a la prensa, antes de que llegara a manos de los fiscales, es la que se le había enviado al psiquiatra Aníbal Areco, uno de sus peritos de parte.
“Emerge con claridad que quien ostentó el rol de perito de parte de la imputada Agustina Cosachov habría recibido exclusivamente el informe identificado luego como viralizado”, señalan los fiscales Cosme Iribarren, Patricio Ferrari y Laura Capra en el escrito en el que hoy informaron que iniciaron una instrucción penal preparatoria para investigar a Areco por la violación del secreto.
Fuentes judiciales explicaron a Télam que la filtración pudo ser identificada a partir de la previsión que el viernes tuvo Corasaniti cuando le envió a cada parte una copia con un error de tipeo específico para cada uno de los receptores de ese informe, algo que además quedó documentado en un acta incorporada a la causa.
Claudia, Ana, Liliana y Rita Maradona, las cuatro hermanas del excapitán de la selección campeona en el mundial de México 86, manifestaron hoy en un comunicado su “indignación” por la filtración del informe y aseguraron que su hermano “no merecía morir así”.
La junta médica concluyó que Maradona era un paciente con pluripatologías que agonizó 12 horas antes de morir a los 60 años el 25 de noviembre, que “no estaba en pleno uso de sus facultades mentales”, que el operativo montado en la casa de del barrio San Andrés de Tigre no era una internación domiciliaria y que pudo haber tenido “más chances de sobrevida” si hubiera estado en una clínica.
Además, calificó al equipo médico como “deficiente”, “temerario” e “indiferente” ante la posibilidad cierta de su muerte y que lo abandonaron “a la suerte”.
El equipo de investigadores coordinado por el fiscal general de San Isidro, John Broyad, se tomará un par de semanas para analizar las conclusiones de la junta y en base a ellas formular la imputación para los llamados a indagatoria.
Según las fuentes, el equipo fiscal no sólo evalúa agravar la calificación penal, sino que también podría sumar nuevos imputados del entorno no médico de Maradona.
Aparte de Luque (39), Cosachov (35), Díaz (29) y Madrid (36), los otros tres profesionales de la salud imputados en la causa son el enfermero Ricardo Omar Almirón (37); la médica que coordinaba la internación domiciliaria para la prepaga Swiss Medical, Nancy Forlini (52); y el coordinador de los enfermeros, Mariano Perroni (40).