Los pronósticos de el Relevamiento de Expectativas del Mercado del Banco Central respecto de la inflación anual, mantuvieron la estabilidad en octubre en un 100% para 2022, y si bien hay paritarias que lograron superar ese tope, la mayoría han quedado rezagadas por el momento.
Según cálculos del Observatorio del Derecho Social de la Confederación de Trabajadores Argentinos Autónoma (CTA-A), los salarios registrados perdieron, en promedio, un 3,5% de su poder adquisitivo entre agosto de 2022 y el mismo mes de 2021.
Por eso, al interior del Gobierno se desarrolla un debate acerca del mecanismo para sostener el poder adquisitivo del salario o, al menos, limitar el retroceso. Así lo reconoció el presidente Alberto Fernández al señalar que “estamos hablando con Sergio Massa del tema y cómo resolverlo”.
La vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner reavivó la discusión al encabezar un plenario de delegados de la Unión Obrera Metalúrgica (UOM). Recordó que durante su segundo gobierno “se recuperó el salario de los trabajadores”, y respaldó la implementación de una suma fija que es algo que “no puede ir en contra de la negociación paritaria”.
Por su parte el Secretario General de la Federación Gráfica Bonaerense, Héctor Amichetti, se mostró a favor de que el Gobierno otorgue una suma fija al conjunto de los trabajadores. Amichetti explicó que “hay que levantar la capacidad de ingresos del pueblo trabajador y esto no anula la continuidad de la discusión libre de paritarias”.
El sindicalista gráfico coincidió así con lo expresado por otro integrante de la CGT, el secretario general adjunto de Camioneros Pablo Moyano, quien también había manifestado su postura a favor del otorgamiento de una suma fija: “yo, Pablo Moyano, no voy a impedir que un trabajador que tenga salario bajo tenga la posibilidad de cobrar un bono o una suma fija”, había dicho el dirigente de los camioneros.
En la misma línea, el secretario gremial de la CGT, Mario Manrique (Smata), había adelantado en declaraciones radiales que “nadie pierde nada si hay un aumento por suma fija. Se trata de una mejora salarial a los trabajadores. Si alguien se puede ofender con esa medida, que se ofenda. No podemos esperar mucho tiempo más. Hay gente que necesita reforzar sus ingresos”.
“Nosotros, con Pablo Moyano, luchamos por los laburantes. Acá tenemos un problema grande que es la inflación que nos come el salario. Es momento de implementar políticas con mejor distribución de la riqueza”, puntualizó.
El ministro de Trabajo bonaerense, Walter Correa, explicó que si bien “la discusión paritaria establece el piso para una negociación”, pueden haber otras iniciativas que “preserven el bolsillo” de los trabajadores como el otorgamiento de una suma fija.
“Todo lo que se articule para mejorar la situación salarial de los trabajadores en este contexto será bienvenido. Lo que se discute en una paritaria es para establecer los pisos, después se ramifica. Si puede haber otras medidas para cuidar el bolsillo de los trabajadores deben tomarse”, remarcó el ministro del gobierno de Axel Kicillof.
El titular de la cartera del Interior, Wado De Pedro, dijo que la intención era otorgar una suma fija a los trabajadores registrados tal como había hecho el gobierno en diciembre de 2019 cuando, a días de asumir, estableció una suba compulsiva de $ 4000 para los salarios registrados, que impactaron de manera diferente entre los distintos convenios y entre las diversas categorías al interior de cada uno de ellos.
Un sector de la CGT, sin embargo, la considera un mecanismo que afecta el ejercicio de las paritarias y achata la pirámide salarial. Así se lo trasladaron a la ministra de Trabajo, Kelly Olmos, en una reunión el martes 1° de noviembre en la sede de UPCN. Olmos reconoció tras la reunión que “desde el sector gremial, el consenso general es la paritaria”. Unos días antes la titular de Trabajo había aclarado que “no se habla de una suma fija sino un bono de fin de año”, dando a entender que se trataba de un debate saldado al interior del gobierno.
El pasado viernes, la CTA de los Trabajadores mantuvo una reunión con Kelly Olmos. Hugo Yasky, Secretario General de la Central, señaló al diario Tiempo Argentino que “le planteamos que se avance con una suma fija y Kelly Olmos volvió a plantear su objeción”. “Planteamos una mesa para hacer un mapa de los salarios reales. Existe un problema de dispersión”, añadió el dirigente.
La ministra de Trabajo confirmó en esa reunión la decisión de reunir nuevamente al Consejo del Salario Mínimo durante la segunda quincena de noviembre.