El presidente Javier Milei inaugura hoy 1º de marzo a las 21 hs las sesiones ordinarias del Congreso 2025. Será su segunda presentación en el Parlamento con este fin en calidad de Presidente, y será transmitida por la Televisión Pública y en cadena nacional.
Por segundo año consecutivo, el jefe de Estado tomará la palabra de noche, en un horario pensado para facilitar que el público sea testigo del discurso a través de los medios de comunicación.
La apertura de sesiones ordinarias del Congreso es una de las ceremonias institucionales más importantes de la República y un momento clave en la agenda política todos los años.
Se realiza con un acto que encabeza el Presidente y al que asisten los diputados y los senadores de la Nación, además de otras autoridades invitadas, como los gobernadores, los ministros del Gabinete, diplomáticos, ex presidentes y los jueces de la Corte Suprema de Justicia de la Nación.
El artículo 63 de la Constitución Nacional establece que el período de sesiones ordinarias comprende entre el 1 de marzo y el 30 de noviembre. Antes de la reforma constitucional de 1994, el período se extendía desde el 1 de mayo hasta el 30 de septiembre de cada año.
Durante este acto, el jefe de Estado suele exponer los lineamientos generales de la actividad parlamentaria y los proyectos que se pretenden enviar al recinto para ser debatidos a lo largo del año.
Además, en virtud del artículo 99, durante el acto, el mandatario nacional debedar cuenta del estado de la Nación y recomendar, a su consideración, las medidas que juzgue necesarias y convenientes.
*Qué son las sesiones ordinarias*
El período de sesiones ordinarias es el tiempo durante el cual los diputados y senadores tratan iniciativas en el recinto. No obstante, la actividad de los legisladores no se limita a esas reuniones, porque también hay trabajo en una instancia previa: la de las comisiones.
Para realizar una sesión hace falta un número mínimo de diputados y senadores sentados en sus bancas. La misma puede no convocarse por falta de acuerdo político o por no llegar a ese número mínimo, que se llama “quórum”. Al respecto, la Constitución dice en su artículo 64º que ninguna cámara “entrará en sesión sin la mayoría absoluta de sus miembros”: es decir, la mitad más uno de sus integrantes, que en Diputados son 129 y en el Senado, 37
La Constitución Nacional también prevé el período de sesiones extraordinarias en su artículo 63 cuando dice “… pueden también ser convocadas extraordinariamente por el presidente de la Nación o prorrogadas sus sesiones”; el cual está complementado por el artículo 99, inciso 9, que regula las atribuciones del Poder Ejecutivo al decir “… o lo convoca a sesiones extraordinarias, cuando un grave interés de orden o de progreso lo requiera”.
El juego de ambas normas constitucionales expresa que la convocatoria es una facultad exclusiva del Poder Ejecutivo, el cual además determina cuales son los asuntos “de grave interés de orden o progreso” que hacen necesaria la convocatoria.
Las Cámaras solo pueden tratar durante ese período los temas ya determinados. La limitación señalada, de acuerdo con la doctrina, jurisprudencia y costumbre parlamentaria atañe solamente a las facultades legislativas del Congreso pero no al ejercicio de las de carácter administrativo y jurisdiccional. En síntesis, esta es una importante atribución del Poder Ejecutivo de carácter político porque restringe las facultades del Poder Legislativo por un período determinado, ya que en la convocatoria debe fijarse el plazo.
Finalmente, debe tenerse presente que los distintos períodos de sesiones deben ajustarse a un principio básico que es la simultaneidad de las sesiones de ambas cámaras: la actividad en Diputados y en el Senado debe coincidir en su comienzo, desarrollo y conclusión.
*Tipos de sesiones del Congreso*
Las ordinarias: que se llevan a cabo durante el período ordinario de sesiones, del 1 de marzo al 30 de noviembre. Estas pueden ser de tablas (es decir, en los días y horarios regulares acordados cada año y sin temario específico) o especiales (a pedido de al menos 10 diputados o senadores, según el caso, con sus firmas y para tratar un temario predeterminado, que figura en esa misma solicitud).
Las extraordinarias: que se llevan a cabo fuera del periodo ordinario y son convocadas por el Poder Ejecutivo. Por ejemplo, en diciembre, enero y/o febrero.
Pero, como señala la Constitución, las sesiones ordinarias también pueden realizarse más allá del 30 de noviembre cuando son prorrogadas. La diferencia entre las “ordinarias prorrogadas” y las “extraordinarias” radica en que, en el último caso, el listado de asuntos a tratar lo define el Presidente por decreto.
*Las sesiones a través de la historia, en números*
- Son 143 si se las cuenta desde 1862, año en el que Bartolomé Mitre, entonces presidente a cargo de la Argentina después de la acefalía provocada por Santiago Derqui y Juan Esteban Pedernera, hiciera la primera.
- Si se consideraran las seis aperturas realizadas por Justo José de Urquiza en los años en los que ejerció la presidencia entre el 5 de marzo de 1854 y el mismo día de 1860, y las dos que efectuó Santiago Derqui durante su gestión en los años 1860 y 1861, la de hoy sería la 151 apertura. Este último es el cálculo correcto por cuanto Urquiza fue el primer presidente constitucional de la Argentina, aunque Buenos Aires no estuviera por entonces unida al resto de la Confederación, y luego fue sucedido por Derqui (segundo presidente constitucional del país) quien gobernó hasta el 5 de noviembre de 1861, día en el que abandonó el cargo.
- El presidente que más cantidad de veces hizo la apertura de las sesiones ordinarias fue Julio Argentino Roca: lo hizo en doce ocasiones. No debe perderse de vista que es el presidente de la Argentina que más cantidad de años ejerció la presidencia (doce años en dos períodos separados: octubre de 1880 a octubre de 1886, y octubre de 1898 a octubre de 1904)
- Juan Domingo Perón hizo once aperturas de sesiones ordinarias; Carlos Saúl Menem diez e Hipólito Yrigoyen y Cristina Fernández ocho cada uno. Lo notable es que el presidente radical siempre hizo las aperturas enviando un discurso, sin asistir personalmente al Congreso. Tampoco asistieron a hacer la apertura de las sesiones ordinarias Bartolomé Mitre en 1866, Roque Saenz Peña en 1914, Marcelino Ortiz en 1939 ni Santiago Castillo en 1941 y 1942.
- Por otra parte hubo dos presidentes que solo hicieron una apertura de sesiones ordinarias: fueron Manuel Quintana en 1905 y Héctor José Cámpora en 1973; y otros dos que jamás tuvieron la oportunidad de abrir sesiones ordinarias por el poco tiempo que estuvieron en sus cargos: Raúl Lastiri y Adolfo Rodríguez Saa.
- Hasta el año 1869, año en el que Domingo Faustino Sarmiento hizo su primera apertura de sesiones ordinarias e inauguró la costumbre de los presidentes de leer un discurso, los mandatarios solo decían unas breves palabras y dejaban la lectura del discurso al vicepresidente.